A continuación podemos leer un comunicado de Evaristo Martín Freire, Gobernador Civil de Las Palmas de Gran Canaria, firmado el 22 de febrero de 1954. El Gobernador Civil fue la autoridad política en cada una de las provincias españolas desde mediados del siglo XIX., hasta que a partir de 1997 pasó a denominarse subdelegado del Gobierno.
"[...] nota de este Gobierno Civil, a 8 de los corrientes, recordando la vigencia de la Orden de 3 de febrero de 1937 y Orden Circular de 21 de febrero de 1949, por las que se suspendían las llamadas "FIESTAS DE CARNAVAL", se amplía la misma en el sentido de que la prohibición alcanza al uso de dóminos, caretas o disfraces, en las calles y lugares públicos, y en los cafés, casinos y círculos de todas clases, así como de bailes y diversiones análogas con dicha significación e indumentaria.
Este Gobierno Civil espera la buena comprensión y sentido de la responsabilidad del público en general, se abstenga en absoluto de realizare actos o exhibir atuendos que de alguna manera maticen el carácter carnavalesco de los mismos, a fin de evitar la adopción de enérgicas medidas de corrección.
Al propio tiempo excito el celo y vigilancia de todas las Autoridades y Agentes, velando por el más exacto cumplimiento de la presente Orden, para que denuncien a mi Autoridad a los infractores, a quienes sancionaré ineludiblemente."
"[...] nota de este Gobierno Civil, a 8 de los corrientes, recordando la vigencia de la Orden de 3 de febrero de 1937 y Orden Circular de 21 de febrero de 1949, por las que se suspendían las llamadas "FIESTAS DE CARNAVAL", se amplía la misma en el sentido de que la prohibición alcanza al uso de dóminos, caretas o disfraces, en las calles y lugares públicos, y en los cafés, casinos y círculos de todas clases, así como de bailes y diversiones análogas con dicha significación e indumentaria.
Este Gobierno Civil espera la buena comprensión y sentido de la responsabilidad del público en general, se abstenga en absoluto de realizare actos o exhibir atuendos que de alguna manera maticen el carácter carnavalesco de los mismos, a fin de evitar la adopción de enérgicas medidas de corrección.
Al propio tiempo excito el celo y vigilancia de todas las Autoridades y Agentes, velando por el más exacto cumplimiento de la presente Orden, para que denuncien a mi Autoridad a los infractores, a quienes sancionaré ineludiblemente."
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